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Este jueves, durante su presentación ante la justicia venezolana, la excongresista colombiana, Aída Merlano, afirmó haber sido víctima de maltratos físicos y psicológicos durante su presidio en la cárcel de El Buen Pastor de la capital neogranadina. 

Según relató ante el juez que lleva su causa, los maltratos habrían sido ordenados por los clanes políticos Gerlain y Char, con gran influencia en la Costa Caribe e incluso, en el poder central asentado en Bogotá y con quienes Merlano habría estado vinculada, al punto de conocer en detalle los hilos que sostenían su poder corrupto. 

“Luego de que me privaron de la libertad fui sometida a maltrato psicológico, maltrato físico. Le pagaron al capitán Álvarez, que era quien estaba a cargo de la cárcel “El Buen Pastor” para que me maltratara y para que permanentemente hicieran operativos en mi celda, tratando de buscar a ver si yo guardaba pruebas dentro de la misma en contra de los que sabían que yo tenía pruebas contundentes para demostrar la corrupción que se maneja en el país”, dijo la exsenadora.

En ese sentido, Aída Merlano confesó que había estado involucrada desde su temprana juventud en una relación sentimental con el empresario barranquillero Julio Gerlain, con quien tuvo una hija –Aída Victoria Merlano– y que fue él quien la inició en las arenas políticas. Según la exparlamentaria, ello se habría debido a que es carismática y siempre se preocupó por la gente, el barrio y las necesidades de la comunidad. 

Sin embargo, una vez dentro del círculo, pudo darse cuenta cuáles eran los mecanismos que empleaban los políticos del vecino país para asegurarse algún curul e incluso, una estancia en la Casa de Nariño: la compra de votos. 

Al corriente de esa situación, Merlano habría decidido hacer política independiente, alejada de esas prácticas. Pero ya no era posible escapar. Sabía demasiado y ello habría sido el detonante para procurar no sólo encarcelarla y hostigarla, sino intentar asesinarla. 

“Está más que claro que lo que hicieron conmigo fue un montaje para quitarme del paso y no solamente para eso, para inhabilitarme y guardarme bajo prisión para que los líderes políticos tradicionales de Colombia pudieran seguir trabajando de ma manera que lo venían haciendo”, sentenció. 

Durante la audiencia, Aida Merlano se disculpó con la República Bolivariana de Venezuela por haber ingresado ilegalmente, pero dijo que lo había hecho porque el gobierno de Iván Duque, quien guarda cercanías innegables con las casas Char y Gerlein, quería matarla. 

(LaIguana.TV)