En un Día Internacional del Trabajador atípico, sin posibilidades de movilizaciones ni protestas, el programa de Miguel Ángel Pérez Pirela se enfocó en examinar la situación en la que están quedando, a escala mundial, miles de millones de personas que dependen de un salario.

 

“Comenzamos mayo con esperanzas de que sea un mes en el que podamos salir de las arduas vicisitudes de abril. El Día del Trabajador ha sido conmemorado hoy de forma muy excepcional, sin manifestaciones ni protestas. No se puede, y es paradójico porque la pandemia ha traído gravísimas consecuencias laborales en todas partes del mundo. Es un virus que ataca lo político, lo económico, lo social”, expresó el filósofo y comunicador.

 

En la emisión correspondiente al 1° de mayo, Desde donde sea estuvo dedicado al rol del trabajo en medio de una pandemia, que ya ha causado más víctimas laborales que biológicas. La reflexión se apoyó en estadísticas, pues en su concepto “la filosofía sin elementos históricos y datos es puro blablablá”. Agradeció los datos, en su mayor parte de la Organización Internacional del Trabajo, recopilados por Telesur.

 

“Nuevamente nos hacemos la pregunta ¿o trabajamos para subsistir o nos encerramos en nuestras casas para no morir? Así como existen esas situaciones a las que llaman ganar-ganar, esta parece ser  una de perder-perder. Es una paradoja, palabra que, en términos filosóficos, significa un problema cuya solución es otro problema. ¿Cómo entrarán los trabajadores en la era de la pospandemia?”, planteó, como punto de partida para el análisis.

 

“Según la OIT, al menos la mitad de los trabajadores a nivel mundial podrían perder sus puestos. Dificulto un 1° de mayo que plantee mayores desafíos que este de 2020. Si la crisis económica será peor que la de 2007-2009 y es comparable con la Gran Depresión de 1930, ¿qué será de los trabajadores?”, añadió como interrogante.

 

Indicó que solo en EEUU para final de abril se llegó a 30 millones de desempleados, lo que anuncia que la depresión económica detonada por la pandemia está atacando antes que todo a los trabajadores. “Olvídense de que afectará a los dueños del capital. Ellos dejarán de ganar, pero quienes van a sufrir son los que fungen de motores de la producción, los trabajadores”.

 

Y es que, de acuerdo al también director de LaIguana.TV, los azotes económicos de la emergencia sanitaria han demostrado algo que al parecer el mundo había olvidado: “Cuando los trabajadores se encuarentenan, no hay producción. La economía planteada como un ente abstracto es un flatus vocis, puro viento. La verdadera economía es la que se encarna en los trabajadores”.

 

Reiteró un punto ya planteado en varios de los programas previos: se ha planteado un debate a escala global entre cuidar la salud de las personas y reactivar la economía, una dicotomía que resulta falsa porque si los trabajadores enferman masivamente tampoco habrá posibilidades de reimpulsar la producción. “Hay países que optan por reactivar la economía, sin importar lo que les pase a los trabajadores. Otros buscan un equilibrio precario. Es una cruel realidad porque hay una encrucijada entre mantener la economía o defender la vida. Es necesario superar ese falso dilema y buscar una vía media, un punto de equilibrio que conjugue los dos objetivos, que se consiga una economía que no sea dogma ni fin en sí misma, sino instrumento para el bienestar del ser humano. Al fin y al cabo, la mayoría de la sociedad la integran los trabajadores, no los dueños de empresas ni tampoco quienes lideran el aparato burocrático gubernamental. Pueblo es sinónimo de trabajadores. El Covid-19 nos coloca de frente no a reflexiones y análisis, sino a una realidad muy dura”.

 

La complejidad del problema tiene que ver con su condición de círculo vicioso. El mundo detenido por las cuarentenas tiene un efecto directo en la economía por la reducción del consumo de bienes y servicios y eso conlleva a más disminución de la producción, lo que a su vez se traduce en la pérdida de millones de empleos. “La OIT ha dicho que se perderán 300 millones de empleos. La catástrofe del Covid-19 no son solamente los 3 millones 254 mil 727 infectados ni los 233 mil 257 fallecidos, sino además un efecto directo económico, laboral y social con 300 millones de empleos perdidos”, detalló.

 

Como botón de muestra, señaló que la empresa constructora de aviones Boeing anunció recorte de 10% de su personal, lo que significa unos 16 mil empleos. “Las cifras parecen abstractas, pero estamos hablando de gente que sale a la calle a llevar el pan nuestro de cada día a la casa”.

 

Las medidas que toman las empresas para enfrentar la caída del consumo y, por tanto, de sus ganancias, afectan a los trabajadores. Algunas de estas medidas, que pueden resumirse en la frase “la cuerda se rompe por lo más delgado”, son:

 

– Reducción del salario. Las empresas alegan que no pueden vender y por tanto deben reducir sus gastos.

– Aumento de la jornada laboral. El trabajador tendrá que trabajar más horas por el mismo sueldo.

– Recortes de beneficios. Se eliminan reivindicaciones.

 

 

“El Covid-19 no solo es un problema biológico sino socioeconómico y político. En los casos de EEUU y varios países europeos, los primeros en pagar las consecuencias son los trabajadores migrantes, los que hacen los trabajos que los ciudadanos nacionales de esos países no quieren hacer”, agregó.

 

“Esto nos lleva a hacer una reflexión sobre los sectores sociales más débiles. Por ejemplo, el trabajo juvenil y el femenino, pues a los jóvenes y a las mujeres se les paga menos por el mismo trabajo. En Europa y EEUU se da el fenómeno del reparto a domicilio. Empresas que contratan a jóvenes para que vayan en bicicleta o moto a llevar comida a las casas, sin contratos laborales de ningún tipo. Ya sobre esto había protestas en varias partes del mundo. El Covid nos está mostrando una práctica bastarda, injusta que está haciendo pagar directamente a los trabajadores, en particular a migrantes, jóvenes y mujeres. La pandemia ha puesto al descubierto una sociedad que apuesta por la salud de las empresas y no a la de los trabajadores”, puntualizó.

 

Abundando respecto a la situación de los trabajadores migrantes, Pérez Pirela indicó que 30% de los infectados por Covid-19 en Nueva York pertenecen al segmento de 11 millones de indocumentados hispanos que no pueden ir al hospital en EEUU porque no quieren terminar presos o deportados. “Se mezcla el virus con sus consecuencias sociales. Pierden sus trabajos porque cayó la producción y si por mala suerte contraen el Covid-19 no pueden pedir asistencia médica”.

 

Pero si es grave la situación de los trabajadores que están perdiendo sus empleos, ¿qué puede decirse del cuadro que afrontan los trabajadores informales que viven en EEUU, en Europa Occidental y especialmente en el sur del mundo? También de acuerdo a las cifras más actualizadas, son las principales víctimas de la pandemia y sus secuelas económicas:

 

– El Grupo más vulnerable a escala mundial es el de 1 mil 600 millones de personas que pueden perder sus trabajos informales.

– En África y América, el primer mes de la pandemia afectó 81% los ingresos de los trabajadores.

– En Europa y Asia Central, 70% de los trabajadores perdieron su fuente de sustento.

– En la región Asia-Pacífico, 21,6% de los trabajadores fueron afectados.

– Entre los trabajadores a tiempo completo hubo deterioro de 10,5%, relativamente menor, pero en términos absolutos afecta a 305 millones de trabajadores.

– En horas de trabajo perdidas, se contabiliza -4,5%, incidiendo en 130 millones de empleos.

 

En lo que respecta a los países más afectados, presentó algunos datos del empleo, vinculados a la cifra actual de infectados por Covid-19:

 

EEUU: 26 millones de solicitudes de subsidio por desempleo. Al terminar el mes, 30 millones (una cantidad igual a la población completa de Venezuela) pidieron esa ayuda. Especialistas dicen que la tasa de desempleo puede alcanzar el 15 o 20%. Muy parecido a la Gran Depresión. Este país lidera la estadística de contagiados por coronavirus, con 1 millón 69 mil 534 personas.

 

– España: El primer trimestre tuvo 3 millones 313 mil desempleados. Tiene, además, 213 mil 435 infectados.

– En Italia, que acumula 205 mil 463 casos de Covid-19, la mitad de empresas están en standby, lo que implica 7,4 millones de trabajadores afectados.

– En Chile se estima que hay 800 mil desempleados

– En Colombia, los cálculos ubican el desempleo en 12%, lo que significa casi 3 millones de trabajadores.

 

Subrayó que se trata de una catástrofe laboral a escala mundial que los grandes capitales, las empresas transnacionales y los intereses financieros mundiales pretenden solucionar empujando a los trabajadores a regresar a sus puestos, lo cual es peligroso, por decir lo menos.

 

“Vimos que el gobernador de California, que había ordenado reanudar actividades, metió el freno de mano y el retroceso, y cerró de nuevo las playas, especialmente en el condado de Orange. Fue criticado. Yo lo apoyo porque el epicentro de la pandemia está en EEUU y forzar una salida antes de tiempo de la cuarentena es poner en peligro a los trabajadores y también a la economía, porque sin trabajadores no hay producción, no hay economía”.

 

En una actitud  opuesta se encuentra el gobernador de Texas, donde comienzan a abrir restaurantes, aunque con mesas separadas por una distancia de seis pies, lo que significa que estarán a 25% de su capacidad para airear y respetar la separación entre comensales.

 

“En Florida, que tiene las peores cifras después de Nueva York, van a reabrir los restaurantes. Es peligroso porque es uno de los estados que más tardó en tomar medidas y ya quiere levantarlas”.

 

Datos del Covid-19

 

La reflexión sobre los estragos económicos no suponen que la pandemia ha cesado. Las cifras demuestran lo contrario. Desde donde sea ofreció algunas actualizadas para la hora del programa (entre 7 y 8 de la noche en Venezuela):

 

Contagiados:

 

– Global: 3 millones 254 mil 727

– EEUU: 1 millón 69 mil 534

– España: 213 mil 435

– Italia: 205 mil 463

– Reino Unido: 172 mil 481

– Francia: 167 mil 299

– Alemania: 163 mil 9

 

 

Fallecidos:

 

– Global: 233 mil 257

– EEUU: 64 mil 789

 

 

“Estas cifras demuestran que la mayor cantidad de infectados están en EEUU y los países más importantes de la Unión Europa, es decir en naciones que integran las mayores alianza bélicas, económicas y financieras del mundo. Preocupa Brasil, que ya está en el décimo lugar a nivel mundial, a punto de pasar a Irán y ya por encima de China en número de infectados y fallecidos. También preocupa Rusia, que tiene 106 mil 498 contagiados. Y, por supuesto, sigue preocupando EEUU por la barbaridad del número de fallecidos y por el hecho más bárbaro aún de que el presidente y varios gobernadores están pensando en reanudar las actividades”, comentó Pérez Pirela.

 

Lecturas recomendadas

 

En esta oportunidad, la recomendación bibliográfica fue de un solo libro que tiene dos tomos:

 

Lo mejor del periodismo de América Latina (volúmenes 1 y 2), de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano.

 

(LaIguana.TV)

 

 

]]>