En la actualidad, el dirigente opositor Henrique Capriles Radonski reconoce que la oposición venezolana estuvo muy influida por la política de la administración del expresidente estadounidense, Donald Trump, hacia Venezuela. En su juicio, la salida Trump de la Casa Blanca abre el compás para alcanzar una solución política en el país.

«Nosotros tuvimos unos tiempos muy complejos porque la política estaba muy influenciada por esa Administración. Temas como el Programa Mundial de Alimentos abrían una confrontación muy dura entre quienes piensan que servir un plato de comida significa darle oxígeno a Maduro y quienes pensamos que servir un plato de comida es para que un venezolano no se muera de hambre. Se le ha engañado a la gente diciendo que si la gente come o si la gente tiene medicinas eso le da oxígeno a la dictadura. No, eso le da oxígeno al pueblo venezolano«, dijo Capriles en una entrevista concedida al diario El País. 

De su declaración se desprende la inocultable división de la oposición. Más adelante, en su conversación con la periodista Inés Santaeulalia, admitió directamente que existen «problemas de fondo» entre quienes se oponen al gobierno del presidente Nicolás Maduro. Él se pone en el bando de aquellos que ven en la política la vía para mejorar la vida de la gente y no entre quienes, con sus acciones, debilitan «el tejido social», en clara alusión a la política extremista que avanzan el exdiputado Juan Guaidó y el dirigente derechista Leopoldo López.

Por ello, indicó que «cuando estaba Trump», sugerir alternativas que no implicaran el perjuicio de los venezolanos –es decir, la aplicación de medidas coercitivas unilaterales–, «era prácticamente desafiar la política que había hacia Venezuela», pues «nadie quería confrontar la política de Trump», incluida Europa.

Desde su punto de vista, hablando «como venezolano dentro de Venezuela, su política –la de Trump– no significó nada», sino solamente sirvió al exmandatario «para ganar políticamente en Florida». «Que no esté cambia radicalmente la posibilidad de generar algún tipo de solución con racionalidad», añadió.

Con Trump fuera de escena, el dos veces excandidato presidencial destacó que la «comunidad internacional» está llamada a jugar «un rol muy importante» en la solución de las disputas políticas en Venezuela y, en ese orden, reconoció que el presidente venezolano ha hecho «gestos» orientados a «abrir las puertas de una discusión sobre un acuerdo, una solución política», con miras a recuperar la, según él perdida, democracia venezolana.

(LaIguana.TV)