El expresidente de Colombia y Premio Nobel de la Paz, Juan Manuel Santos, confesó recientemente los falsos positivos cometidos durante su gestión como ministro de la Defensa de Álvaro Uribe.
“Le echó la burra pal monte a Uribe”, comentó el filósofo y comunicador venezolano Miguel Ángel Pérez Pirela en su programa Desde Donde Sea.
Los detalles de estas declaraciones fueron fundamentadas en una nota publicada por el portal LaIguana.TV, en la que se precisó que el mandatario y economista ejerció el poder entre 2010 y 2018, y antes fue ministro de Defensa de Álvaro Uribe (2002-2010), bajo cuyo mandato se perpetraron miles de asesinatos de civiles que luego eran presentados como guerrilleros caídos en combate.
Santos reconoció el pasado viernes 11 de junio que miles de civiles fueron ejecutados por militares de Colombia, por la presión que recibieron para dar resultados en la lucha contra las guerrillas y pidió perdón a las víctimas de esos crímenes.
«Santos dijo que había que inflar la cifras y cómo no lo lograron empezaron a matar civiles y lo confesó. El Premio Nobel confiesa y pidió perdón, pero ¿será que en Colombia uno confiesa una masacre, pide perdón y ya… no va preso nadie? El Premio Nobel de la Paz reconoce que fue coautor de asesinatos de ciudadanos, pide perdón y todo queda arreglado”, cuestionó el escritor.
“No me cabe la menor duda de que el pecado original, lo que en el fondo dio pie para estas atrocidades, fue la presión para producir bajas, así como los premios por lograrlo”, expresó Santos.
Mencionó Pérez Pirela “y él lo dice así, mínimo quítenle el Premio Nobel de la Paz”.
Indicó que el alto mando militar siempre ha negado que estos asesinatos en Colombia incentivados por un “body count” o conteo premiado de cuerpos, fueran una práctica sistemática en el ejército.
Para el exgobernante son una mancha indeleble en el honor de un Ejército que tiene sobrados motivos para vanagloriarse, pero que también debe tener la entereza para reconocer la verdad y pedir perdón. Es una de las formas para resarcir el daño”.
Conocidas en el ámbito militar como “falsos positivos”, las ejecuciones de civiles son el mayor escándalo que envuelve al ejército colombiano. Oficiales y soldados han confesado su participación ante el Tribunal de Paz, en busca de beneficios penales.
(LaIguana.TV)
