Este viernes, Leopoldo López, quien reside en Madrid tras huir de la justicia en octubre de 2020, aseguró que al recibir la noticia de la solicitud de extradición que enviará el gobierno de Venezuela a su par de España, se había presentado en la Audiencia Nacional porque no tiene «absolutamente nada qué esconder».

En una rueda de prensa, el dirigente ultraderechista calificó el caso que se sigue en su contra en Venezuela como un «caso político» y descartó que estuviera solicitando asilo en el país ibérico.

El presidente Nicolás Maduro anunció el pasado miércoles -14 de julio- que Venezuela iniciará los trámites para solicitar a España la extradición del militante de ultraderecha: «Le he dicho al canciller Jorge Arreaza que se comunique con el nuevo canciller (español), recién nombrado, canciller Albares, y le muestre todas las pruebas y le solicite en extradición al señor Leopoldo López, principal propiciador de golpes de Estado, violencia terrorista y ahora esta violencia delincuencial”, dijo.

El jefe de Estado, además, mencionó que la Fiscalía de Venezuela tiene las pruebas que vinculan a López con los hechos terroristas ocurridos recientemente en la Cota 905. 

López, recordemos, fue condenado en septiembre de 2015 a 13 años y 9 meses de prisión por liderar «La Salida», estrategia basada en acciones terroristas –guarimbas– con la que se pretendió derrocar en 2014 al presidente Nicolás Maduro y que se saldó con 43 fallecidos, cientos de heridos y daños millonarios a la propiedad pública, particularmente a las sedes de las instituciones del Estado y al Metro de Caracas.

En 2017, como parte de las negociaciones entre el gobierno y la oposición, le fue otorgada una medida cautelar de casa por cárcel, pero escapó de su residencia en la madrugada del 30 de abril de 2019 para liderar, en compañía de Juan Guaidó, un fallido golpe de Estado.

Tras el fracaso de esta nueva acción sediciosa, se alojó en la residencia privada del entonces embajador español en Caracas, Jesús Silva Fernández, hasta el 26 de octubre de 2020, cuando emprendió nuevamente la huida, esta vez hacia Colombia, cuyo gobierno reconoció haber cooperado con López para su fuga.

Por su parte, Madrid se ha negado a admitir que Silva facilitó el escape y, además, permitió su ingreso y residencia en el territorio español. 

(LaIguana.TV)