Este martes, la Agencia Internacional de Energía (AIE) anunció en un comunicado que los 31 países que conforman la Junta de Gobierno del organismo acordaron la liberación de 60 millones de barriles de crudo «de sus reservas de emergencia» para estabilizar el mercado. 

Con esta acción se pretende «enviar un mensaje unificado y fuerte a los mercados petroleros mundiales de que no habrá escasez de suministros» derivada de las operaciones militares que desarrolla Rusia en Ucrania. 

Según el texto, «los ministros de la AIE observaron con preocupación los impactos en la seguridad energética» de las acciones de Rusia y «expresaron su apoyo a las sanciones impuestas en respuesta por la comunidad internacional». 

Asimismo acotaron que estas acciones se producen «en un contexto de mercados petroleros mundiales ya ajustados, mayor volatilidad de los precios, inventarios comerciales que se encuentran en su nivel más bajo desde 2014 y una capacidad limitada de los productores para proporcionar suministro adicional a corto plazo».

El director ejecutivo de la AIE, Faith Briol, se sumó al coro de voces que condenaron a Rusia y manifestó su complacencia porque el organismo se reuniera «para tomar medidas». «La situación de los mercados energéticos es muy grave y exige toda nuestra atención. La seguridad energética global está amenazada, poniendo en riesgo la economía mundial durante una etapa frágil de la recuperación», argumentó.

Trascendió que la Junta de Gobierno de la AIE recibirá como «invitado especial» en su próxima reunión –que se celebrará a finales de marzo– al ministro de Energía de Ucrania, German Galushchenko.  

De otro lado, en el comunicado se destaca que «Rusia juega un papel descomunal en los mercados energéticos mundiales. Es el tercer mayor productor de petróleo del mundo y el mayor exportador. Sus exportaciones de cerca de cinco millones de barriles por día de petróleo crudo representan aproximadamente el 12 % del comercio mundial, y sus aproximadamente 2,85 millones de barriles por día de productos derivados del petróleo representan alrededor del 15 % del comercio mundial de productos refinados. Alrededor del 60% de las exportaciones de petróleo de Rusia van a Europa y otro 20% a China».

La AIE precisó que sus miembros «tienen reservas de emergencia de 1.500 millones de barriles». De estos, los 60 millones de barriles que serán liberados en fecha próxima representan el 4 % de sus acopios, equivalentes al suministro ininterrumpido de dos millones de barriles de petróleo por 30 días. 

Asimismo, se conoció que es la cuarta vez desde su fundación en 1974, que la instancia adopta esta «reducción coordinada», que se realizó previamente en 1991, 2005 y 2011. 

Por otra parte, los ministros de energía participantes del encuentro de este 1º de marzo insistieron en que «el suministro de energía no debe utilizarse como medio de coerción política ni como una amenaza a la seguridad nacional e internacional» y advirtieron que «la secretaría de la AIE continuará monitoreando de cerca los mercados mundiales de petróleo y gas y brindará recomendaciones a la Junta de Gobierno, incluidas posibles extracciones adicionales de reservas de petróleo de emergencia, según sea necesario».

Para concluir, se instó a todos los países miembros de la AIE a que apoyaran a Ucrania «en el suministro de productos derivados del petróleo» y sugirió a los gobiernos y consumidores mantener e intensificar «los esfuerzos de conservación».

En lo que respecta a Europa, altamente dependiente del gas ruso, la AIE subrayó la necesidad de reducir este nexo «buscando a otros proveedores» y anunció que el venidero 3 de marzo, su Secretaría presentará «un plan de 10 puntos sobre cómo los países europeos pueden reducir su dependencia del suministro de gas ruso para el próximo invierno». 

(LaIguana.TV)