El comisario europeo de Gestión de Crisis de la Unión Europea (UE), Janez Lernačič, comunicó este martes que el bloque está «abierto» a reconsiderar las medidas coercitivas unilaterales que impuso sobre Venezuela si avanzan las conversaciones entre el gobierno del presidente Nicolás Maduro y el sector de la oposición aupado por Washington y Bruselas.

«Por supuesto, estamos abiertos a revisar nuestras medidas restrictivas en caso de que haya un progreso concreto y sustancial en las negociaciones, que incluye el camino hacia mejores procesos electorales para la organización de elecciones presidenciales y legislativas creíbles, inclusivas y transparentes», manifestó el funcionario esloveno en una entrevista con Europa Press.

Lernačič calificó las restricciones como «reversibles» y «escalables», aunque puntualizó que su aplicación –o desaplicación– depende estrictamente de lo que el grupo de los 27 considere como avances democráticos, Estado de derecho y situación general de los derechos humanos en Venezuela.

En las últimas semanas, el gobierno estadounidense ha presionado por la reinstalación de las negociaciones entre Caracas y la así llamada Plataforma Unitaria. Pese a las amenazas de la administración Biden, ello no se ha traducido en anuncios concretos.

Desde inicios de marzo, la Casa Blanca estableció un canal de comunicación directa con Miraflores. Diversos voceros del gobierno de los Estados Unidos admitieron que la crisis del mercado energético estuvo sobre la mesa, pero descartaron de plano cualquier cambio en el reconocimiento de las autoridades del país suramericano.

Asimismo, aunque desde entonces la prensa especializada ha referido insistentemente que en el futuro cercano la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC) podría autorizar la operación de trasnacionales petroleras en Venezuela, eso no se ha concretado.

Empero, a pesar de los aparentemente nulos avances en los asuntos centrales, los contactos se han mantenido. En data reciente se anunció un intercambio de prisioneros tras un acuerdo entre las partes, que, por otro lado, se negaron a ofrecer detalles sobre el tema.

El comisario europeo estará en Colombia y Panamá para reforzar la cooperación humanitaria. Europa Press reseña que en el itsmo inaugurará una reserva humanitaria que permita brindar ayuda más rápidamente en el marco de contingencias como el huracán Ian.

«Esta reserva de ayuda de la UE en el extranjero se utilizará para preposicionar equipos como material de refugio, botiquines de primeros auxilios, alimentos y artículos de saneamiento para entregarlos directamente dentro de la región cuando ocurran crisis como desastres naturales», aseguró.

Sin embargo, el recorrido persigue un objetivo político ulterior: acercar a Latinoamérica a las posturas de Bruselas con respecto a la guerra que se libra en Ucrania, pues aunque muchos países han condenado sin matices la incursión militar de Rusia, también han criticado la política de cercos financieros y diplomáticos a los que se ha sometido a la nación euroasiática.

«Solo tiene sentido para nosotros fortalecer las relaciones con los países de América Latina y el Caribe en un momento en que el derecho internacional y la estabilidad mundial corren el mayor riesgo desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Esto es esencial para la cooperación en cuestiones humanitarias, pero también en el comercio y asociaciones económicas», confesó el funcionario.

En general, los países latinoamericanos han insistido en la necesidad de iniciar de inmediato conversaciones de paz y algunos gobiernos como el de Andrés Manuel López Obrador no solamente han presentado propuestas para avanzar en una paz negociada, sino que también han acusado directamente a la OTAN y a sus aliados –entre ellos la UE– de azuzar el conflicto.

(LaIguana.TV)