El ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, José Valencia, informó este jueves que los efectos de la ciudadanía ecuatoriana otorgada al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quedan suspendidos, apenas horas después de su expulsión de la Embajada de Quito en Londres.

 

En rueda de prensa, junto a la ministra del Interior, María Paulo Romo, Valencia dijo que la suspensión fue «debido a varias irregularidades encontradas en su trámite».

 

A Assange le fue otorgada la ciudadanía ecuatoriana en diciembre de 2017, luego que hiciera solicitud formal de la documentación en septiembre de ese mismo año, tras cumplir más de cinco años en la Embajada de Ecuador en Londres, donde estuvo desde junio de 2012.

 

Valencia y Romo, en la conferencia de prensa ofrecieron algunos detalles de las razones que llevaron a Ecuador a entregarlo a las autoridades británicas.

 

«Hackers rusos»

 

La ministra también señaló que el Gobierno ecuatoriano tiene «la identidad y ubicación de dos hackers rusos que también se encuentran viviendo en Ecuador». Dijo que la información será entregada en las próximas horas a la Fiscalía.

 

«No vamos a permitir que Ecuador se convierta en un centro de piratería informática y no podemos permitir que actividades ilegales se desarrollen en el país», mencionó.

 

Además, detalló que «desde hace varios años vive en Ecuador uno de los miembros claves de Wikileaks y una persona cercana a Assange».

 

«Tenemos evidencia que ha estado colaborando con los intentos de desestabilización del gobierno y que trabaja de manera cercana», añadió.

 

Según la funcionaria el miembro de Wikileaks y la persona cercana a Assange han viajado junto al excanciller Ricardo Patiño a otros países. «La última pista fue a finales de febrero cuando viajaron con diferencia de un día a Venezuela».

 

(RT)