El café es una de las bebidas más populares del mundo. Es tradicionalmente consumido a diario en diversas partes del globo. Sin embargo, esta bebida rica en cafeína podría ofrecer serios riesgos a la salud de algunas personas.
 
El café está contraindicado en el caso de enfermedades gastrointestinales, apuntó la especialista. En particular, la bebida debe excluirse de la dieta de personas que padecen síndrome del intestino irritable, ya que la cafeína puede aumentar la frecuencia intestinal e incluso las posibilidades de diarrea, detalla Eat this not that.
 
Rozanova recomendó, además, que las personas que padecen diabetes sean más conscientes con relación a su ingesta de café. Existen estudios que sugieren que la cafeína puede afectar la acción de la insulina y, por ende, estar asociado con niveles más altos o más bajos de azúcar en sangre.
 
De acuerdo con la nutricionista, el café debe evitarse si una persona desea bajar de peso. Si bien el café por sí solo no causa un aumento de peso, la bebida puede afectar la calidad y la cantidad de sueño. Dormir mal puede comprobadamente promover el aumento de peso. Además, muchas bebidas populares a base de café son altamente calóricas y contienen niveles elevados de azúcar agregada.
 

«Hoy en día está de moda el café con leche en polvo, nata, azúcar. Estas bebidas provocan el proceso de fermentación y matan la beneficiosa microflora intestinal. Como resultado, el sistema inmunológico se debilita y deja de estar preparado para luchar contra virus y bacterias extrañas. Y en caso de problemas con el sistema excretor, la piel sufre», explicó Rozanova.

(Sputnik)