En la nueva emisión del programa Cara a Cara, contenido exclusivo del portal LaIguana.TV, el periodista Clodovaldo Hernández tuvo como invitado al profesor Jorge Laverde, quien es líder distrital del paro nacional en Bogotá y dirigente sindical del magisterio.
El activista precisó que aunque el paro era solo por un día, las protestas se prolongaron por los efectos combinados de la cuarentena, la crisis del pequeño comercio y las dificultades para acceder a la educación, entre otros problemas sociales.
En la entrevista, Laverde describió el escenario que se presenta en el vecino país a propósito del paro nacional y de las protestas que lleva a cabo el pueblo neogranadino, que según la Defensoría del Pueblo, han dejado al menos 26 fallecidos, más de 300 heridos y 87 desaparecidos.
«La policía está disparándole a la gente, sobre todo en la ciudad de Cali (…), que en este momento se ha declarado en conmoción interior, es decir, que la fuerza pública puede intervenir, no hay todas las condiciones de legalidad», apuntó el docente, quien también refirió que aunque en Bogotá la violencia no se ha expresado tan duramente, hay informes documentados de excesos policiales, que incluyen reportes de lesionados en los ojos por causa de los disparos con «balas de goma» (perdigones).
«Ha habido una protesta de orden nacional que hacía muchos años que no se presentaba en Colombia y la represión sigue, y el gobierno amenaza con declarar una conmoción a nivel nacional para atropellar más a la población», alertó el dirigente sindical.
Laverde refirió que si este escenario se concreta, el país entraría bajo el orden marcial, se restringirían los derechos democráticos de la población y la fuerza pública tendría carta blanca para cometer allanamientos y efectuar detenciones por prácticamente ningún motivo, alternativa que, en su juicio, las autoridades estarían barajando para extinguir las manifestaciones.
De otro lado, sostuvo que hay videos que demuestran que «efectivos de la fuerza pública, de la Policía y del Ejército vestidos de civil» acuden a las manifestaciones con el propósito de generar el caos y justificar así la posterior represión.
Con respecto a la instigación que hiciera el expresidente Álvaro Uribe Vélez acerca del uso de armamento letal contra los manifestantes, el líder social puntualizó que los dirigentes del paro saben que «él está detrás de todo el gobierno de Iván Duque, quien realmente cumple las órdenes de su jefe y del partido Centro Democrático, que es de ultraderecha, que está ligado a la mafia del narcotráfico y es lo que nos está gobernando en Colombia».
Asimismo, indicó que tras el trino del exgobernante, se exacerbó la represión en la ciudad de Cali –devenida en epicentro del conflicto– y perdieron la vida varias personas. «Allí está muy clara la intervención del expresidente Álvaro Uribe Vélez». Incluso, enfatizó que el propio Uribe defendió su postura en una entrevista a la cadena CNN, alegando que los manifestantes estaban dirigidos «por fuerzas comunistas» e imperaba «defender a democracia» en Colombia.
En relación con el llamado a diálogo que hiciera Duque, Jorge Laverde cuestionó que inicialmente el mandatario no incluyera en su convocatoria a los líderes de la protesta, si bien apuntó que aparentemente accedió a reunirse con algunos dirigentes sindicales y estudiantiles el próximo 12 de mayo, solo después de haber conversado con agentes políticos.
«El presidente ha tenido muy poca actitud de diálogo con el pueblo. No quiere resolver la problemática, porque está siguiendo las órdenes de las multinacionales, del Fondo Monetario Internacional, para imponer toda una serie de normas» que les son favorables a las empresas, destacó el profesor.
Así, por ejemplo, en el caso de la salud, que aunque está privatizada en 90%, «se la quiere entregar a las multinacionales, a los consorcios de la salud», modelo que se repite en la reforma tributaria, en la que los más pobres deben cargar con el peso de los tributos y las trasnacionales se ven liberadas de compromisos impositivos.
Justamente por ello, arguyó que la reforma tributaria, antes que causa última de las manifestaciones, fue su detonante.
Según datos oficiales citados por el sindicalista, el desempleo alcanza a 15,9% de los colombianos en edad de trabajar, pero de acuerdo con otras estimaciones, la cifra es mucho mayor, porque «cerca del 65%» sobrevive gracias al trabajo informal o a través de negocios pequeños.
Otro tanto sucede con la pobreza, que alcanza al 42,8 % de los hogares del país, con la renta básica, una demanda en la que el Comando Nacional del Paro ha insistido, porque se requiere que la población cuente con los medios para sobrevivir al confinamiento prolongado, medida que se hace inevitable para frenar la pandemia.
Los colombianos, dijo Laverde, también reclaman la creciente corrupción, así como los retrasos en el plan de vacunación, el esquema de cuarentena –que contempla apenas dos o tres días de confinamiento a la semana–, así como la creciente privatización de la educación superior y la ausencia de subsidios que le permitan a los más pobres costearse estudios superiores.
«Estamos en una crisis muy profunda en todos los aspectos», reconoció, de los cuales, una arista preocupante es que el gobierno de Iván Duque ha hecho todo lo posible por desmantelar los magros avances derivados de los acuerdos de paz, mientras la cantidad de excombatientes de las FARC que se plegaron a la desmovilización asesinados, computa ya 250 almas.
Por último, el dirigente desestimó cualquier influencia de los migrantes venezolanos en las protestas, porque aunque es cierto que inicialmente el gobierno pudo plantearse usarles como arma arrojadiza para justificar la represión, organismos internacionales afines a Bogotá le han exigido a Duque que cese la represión, si bien no descartó que en el futuro, el mandatario echara la culpa a Venezuela de la crisis en su país.
«Podemos esperar que un gobierno como el que tenemos, que está orientado por el expresidente Álvaro Uribe Vélez siga echándole la culpa al presidente Maduro y al gobierno revolucionario de Venezuela de los males que le pasan a Colombia. Nosotros, los que estamos en el sector social, popular, los dirigentes sindicales, los que estamos en la lucha sabemos que eso no es cierto», remató.
(LaIguana.TV)
