El escritor Mario Vargas Llosa, cuyas opiniones políticas se ubican en el conservadurismo más extremo, aprovechó una entrevista para usar a Venezuela como plataforma, en procura de ganar el respaldo del electorado peruano a la candidata presidencial del fujimorismo, Keiko Fujimori.
En ese orden, Vargas Llosa invitó a sus compatriotas a mirar «hacia Venezuela» y a aprender «la lección de lo ocurrido», aludiendo a la victoria electoral del comandante Hugo Chávez en 1998, al que unos venezolanos ingenuos, dijo, habrían llevado a la presidencia, sin saber que luego sobrevendría un «régimen».
«Nunca más hubo elecciones libres en Venezuela. Desde entonces las elecciones en Venezuela han sido un fraude sistemático, a medida que el régimen se desprestigiaba y se volvía más impopular, pues, el fraude electoral era muchísimo mayor», aseveró el narrador sin prueba alguna.
Según él, antes de eso, el país «tuvo 40 años de democracia y que empleó, maravillosamente, todos esos años denunciando todas las ilegalidades, los atropellos a la ley que ocurrían en América Latina», dejando de lado, por ejemplo, el historial de violaciones a los derechos humanos de ese período, cuyo culmen se evidenció en los sucesos de El Caracazo, en febrero de 1989.
En un intento por desprestigiar al candidato izquierdista Pedro Castillo, indicó que antes del arribo de Chávez, Venezuela «tenía una economía floreciente» y «era quizá uno de los más ricos del mundo», obviando los altos índices de pobreza y desigualdad presentes, como puede comprobarse a través del examen de las estadísticas oficiales disponibles en portales como el de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CELAC) o el Fondo Monetario Internacional (FMI).
«Yo les diría a mis compatriotas (…) que miren hacia Venezuela y que, si eso los entusiasma, que entonces voten por Pedro Castillo en el caso del Perú. Estoy seguro de que muchísimos de los peruanos no serán tan insensatos y que, en estas elecciones, espero, que voten por el mal menor, que es, indudablemente, desde mi punto de vista, Keiko Fujimori», remató.
