La economista y profesora Pasqualina Curcio es de la opinión que la respuesta a los ataques al bolívar que han derivado en la pérdida creciente de su poder adquisitivo, es la indexación de los salarios, pues eso impide que «el enemigo» –agentes internos y externos que se han confabulado para hacer del dólar un instrumento de guerra– alcance el objetivo de desestabilizar la economía.

«¿Tú me atacas la moneda y me deprecias el valor? Entonces, cada vez que tú lo hagas, yo voy a ajustar el poder adquisitivo y el salario real, porque no voy a permitir que tú logres desestabilizar cada uno de los hogares y, además, acompañado de un discurso confuso de que la culpa son las políticas del gobierno», dijo Curcio en una entrevista con el periodista Clodovaldo Hernández para su espacio Cara a Cara.

A este respecto, la académica hizo referencia a procesos de ataque al signo monetario como el que vivió Nicaragua en la década de 1980 o el que padeció Chile durante el gobierno del presidente Salvador Allende, que fueron erróneamente interpretados como efectos derivados de políticas gubernamentales inadecuadas, cuando la realidad era otra.

«Nosotros sabemos –y por eso la importancia de reconocer [que no es] un problema de las políticas que se han desarrollado en la revolución– que nos han atacado y que el ataque al bolívar ha tenido su efecto. Entonces, si ya nosotros estamos reconociendo que no es un problema de que aumentó la cantidad de dinero porque el gobierno quiso financiar su déficit fiscal, que es ese discurso que confunde, que confundió a Nicaragua y a esos otros países, actuemos en consecuencia», argumentó.

A su parecer, aunque el gobierno del presidente Nicolás Maduro se mantiene como «un gobierno revolucionario» y exhibe incuestionables logros en las arenas política y diplomática en medio de una «guerra multidimensional», aún debe remontar la cuesta en los asuntos económicos, donde los adversarios han concretado «una situación de desestabilización económica» que se expresa en la disminución de los niveles de consumo, la disminución del salario real y la dolarización de facto.

«Yo creo que hay mucho por hacer en el tema económico, que tenemos una gran ventaja: no caemos en el cuento que quizá históricamente se cayó, pero hay que no solamente reconocerlo en el discurso sino a través de las políticas», señaló, a modo de conclusión.

(LaIguana.TV)