La nutricionista Margarita Koroliova explicó a Sputnik las razones por las que no se debe tomar café inmediatamente antes o después de una comida y reveló el momento ideal para que el organismo aproveche las propiedades de esta bebida de una forma saludable. 

Según la especialista, empezar el día con una taza de café en el desayuno no es el hábito más saludable, ya que la bebida vigorizante impide la absorción de sustancias útiles que entran en el cuerpo con los alimentos. 

«No recomiendo el café a mis pacientes con el estómago vacío o justo después de una comida. El café dificulta la absorción de minerales como el hierro, el zinc, el magnesio y el calcio. Estos minerales son fundamentales para la salud tanto de las mujeres como de los hombres», argumentó. 

El café es ideal consumirlo entre las comidas principales, según Koroliova, en este caso todas las propiedades útiles del café funcionarán y el equilibrio mineral en el cuerpo no se verá perturbado. 

«Es mejor utilizar el café entre comidas como una especie de ritual. Debe realizarse al menos media hora antes de la comida o al menos una hora después de la misma», concluyó. 

(Sputnik)