La aplastante reelección de Nayib Bukele en El Salvador es notoria, a pesar del lento avance del escrutinio de las elecciones presidenciales celebradas el domingo en el país centroamericano.
Hasta la mañana de este lunes, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) informó en su página web sobre el procesamiento de apenas 2.697 de 8.562 actas, es decir el 31,49 % de las mismas. La cifra se dejó de actualizar, según reseña La Prensa Gráfica, a las 10:00 de la noche del domingo.
Posteriormente, horas después, en la transmisión de los datos se dio un salto al 70,25 % de las actas procesadas (6.015 de 8,562). Con los nuevos datos, el mandatario de la ‘mano dura’, apoyado por el partido Nuevas Ideas, alcanza 1.662.313 votos; seguido del exdiputado Manuel Flores, del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), con 139.025; mientras que de tercero está el empresario Joel Sánchez, de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena), con 122.926.
En cuarto lugar se ubica el abogado Luis Parada, de Nuestro Tiempo, con 45.516 votos; le sigue el médico obstetra José Renderos, de Fuerza Solidaria, con 16.317; y en último lugar está la arquitecta Marina Murillo, de Fraternidad Patriota Salvadoreña (FPS), con solo 13.432.
Para estos comicios, según el TSE, estuvieron habilitados para votar al menos 6.214.399 personas; 5.473.305 de ellas en El Salvador y las 741.094 restantes en el exterior.
«Vencimos al bipartidismo»
Bukele ya se pronunció respecto a los primeros resultados, declarándose vencedor. Señaló que la oposición en su país ha quedado «pulverizada».
«Vencimos el bipartidismo que nos tenía sometidos y pasamos la página. Le pusimos fin a la posguerra», indicó Bukele, quien se convierte en el primer presidente de El Salvador en ser reelegido de forma inmediata en décadas.
Celebró no solo haber ganado la Presidencia por segunda vez y con más del 85 % de los votos, sino que también dijo haber vencido en la nueva Asamblea Legislativa, «con 58 de 60 diputados».
Este proceso estuvo marcado por fuertes críticas, puesto que los detractores de Bukele consideran que un nuevo mandato del presidente es inconstitucional, alegando que la carta magna lo prohíbe. Concretamente, el artículo 154 de la Constitución reza que «el período presidencial será de cinco años y comenzará y terminará el día primero de junio, sin que la persona que haya ejercido la Presidencia pueda continuar en sus funciones ni un día más». No obstante, en 2021 la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) avaló la reelección presidencial inmediata.
Sin votar
Por otro lado, el Fiscal General de la República, Rodolfo Delgado, denunció que recibió reportes de que, por disposición de Indra, la empresa que se encarga de la logística del voto en el exterior, no se permitió que se continuara el voto luego de que se cumpliera la hora del cierre de las urnas a personas que estaban en fila desde antes.
Esto fue confirmado por el TSE, que señaló que Indra había manifestado que algunos propietarios de inmuebles donde se llevaba a cabo la votación, «no quisieron prorrogar los contratos de arrendamientos».
Ante ello, el TSE se comprometió a realizar la planificación necesaria para que Indra garantice la implementación del sistema de votación electrónica presencial a aquellos ciudadanos que no pudieron votar el domingo.
«A la brevedad posible se comunicará la planificación técnica y su desarrollo correspondiente», dice el comunicado del órgano electoral.
(RT)
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