Con respecto a la marcha del 1° de septiembre, el vicepresidente de la República Aristóbulo Istúriz dijo que hubo medidas de persuasión para que las movilizaciones se desarrollaran en paz. «¿Había disuasiva?», preguntó José Vicente Rangel durante su programa dominical transmitido por Televen, a lo que Isturiz respondió: «Claro, fue un hecho disuasivo frente a la amenaza del golpe de Estado».
Asimismo, el vicepresidente resaltó que esas medidas impulsaron al chavismo a salir a la calle y acompañar al presidente Nicolás Maduro, en una muestra de civilidad y democracia. Con respecto al anunciado golpe: «Lo orientó a una reorientación de la lucha, generó la presencia masiva del chavismo».
La demostración de calle, insistió Istúriz, influyó en algunos sectores de la oposición pues, a su juicio, no todos los sectores de la derecha quieren violencia: «La gente rechaza la violencia y ese día se pretendía imponer la violencia como mecanismo para dirimir los conflictos políticos en el país», fueron sus palabras.
«Todo eso queda muerto el 1S», insistió, hablando de los planes desestabilizadores que se desvelaron en torno a la marcha patrocinada por la oposición. «Subestimaron al chavismo una vez más», acotó.
Istúriz reafirmó que tanto él como el presidente Maduro creen en la resolución de los conflictos políticos a través del diálogo: «uno puede conversar con gente de la oposición, pero eso no significa que hay un diálogo político entre los dos, para que haya un diálogo tiene que haber una dirección política de la oposición, que uno se entienda con alguien de la oposición, que alguien responda, el chavismo no tiene problema, el chavismo tiene una cabeza que se llama Nicolás Maduro, tiene una dirección política, en la oposición no podemos contar con eso», concluyó.
(LaIguana.TV)
