cuadro-ojo.jpg

Quien fuera por mucho tiempo ministro de Chávez piensa que no hay intención verdadera para el referéndum y que, en todo caso, revocar al presidente Maduro se traduciría en la reinstalación de la Constitución vigente hasta 1998, la pérdida de las prestaciones sociales, el regreso de la práctica puntofijista de los presos, torturados y desaparecidos, la eliminación de la educación pública gratuita, las cuotas balón, entre otros muchos fantasmas.

 

– Hablando de la MUD y su situación al cierre del mes de septiembre: ¿usted la analiza dividida o unificada, más allá de los discursos públicos, en su propósito de acceder al poder?

 

-La MUD es un saco de gatos en el cual están metidos tanto la social democracia de la Cuarta República (Acción Democrática o sus derivados) como los fascistas radicales que incluso vienen de antes y que de varias maneras apoyaron a Mussolini en su momento, o sus derivados. Sin embargo, tienen a su favor el imperio, dueño del circo, que cuando sea necesario va a poner orden a través del financiamiento y otros mecanismos de «persuasión» por todos conocidos. Por supuesto que me estoy refiriendo a los dirigentes. En las bases, como siempre ocurre, hay simplemente pueblo y allí vale la pena recordar un comentario que hizo Fidel Castro a Chávez a propósito de una votación que había obtenido la derecha en Venezuela: «Chávez: en Venezuela no hay cuatro millones de oligarcas».

 

-Si el antichavismo fuese tutelado, ¿cómo se instruyen las líneas a seguir, a través de quién?

 

-A través de distintos actores que mueven palancas en los negocios, en los medios y también en el mundo político internacional. No es posible obviar la sincronización, ya suficientemente analizada y demostrada públicamente, de actores políticos de la derecha internacional con diferentes medios ubicados en Venezuela, Colombia, España y Estados Unidos (incluyendo sus autoridades) en el montaje de evidentes ollas mediáticas que después no tienen absolutamente respaldo documental.

 

– Ramos Allup, Capriles, Machado, López… ¿Son lo mismo? ¿Alguno de ellos se diferencia de los demás? En qué y cómo.

 

-Sí, se diferencian en cuanto a los métodos, aunque tienen el mismo objetivo: el poder, no el bienestar social.

 

– Cómo valora que un personaje con la trayectoria pasada de Ramos Allup hoy encarne la esperanza de muchos venezolanos para un mejor país.

 

-Eso es escandaloso, pero me pregunto si la propia Revolución no tiene una buena dosis de responsabilidad en eso. Creo que se han cometido muchos errores en el orden político y también en el político electoral. Tal como el propio Chávez denunció en enero de 2011 en el documento titulado «Líneas Estratégicas de Acción Política» donde señalaba, entre otros, las desviaciones capitalistas en el seno del PSUV, el burocratismo, el oportunismo, el sectarismo, el nepotismo, el alejamiento de la base social bolivariana. Por otra parte, la resurrección política de ese señor está siendo impulsada por la torpeza de los máximos dirigentes de quienes están en el poder.

 

– ¿Quién representa la derecha en la MUD? ¿Hay representación de la izquierda en ella?

 

-Todos son de la derecha.

 

– ¿Tiene alguna aproximación la MUD de hoy con la cosmovisión política de Héctor Navarro?

 

-Ninguna. La única coincidencia podría ser el diagnóstico de la incapacidad del Presidente para resolver los graves problemas del país, pero las terapias que podemos recomendar son absoluta y diametralmente opuestas.

 

– ¿Usted ha recibido invitación a militar en alguna de las facciones de la MUD?

 

-No. Primero, francamente no me interesa y, segundo, estoy convencido de que a ellos ni les interesa ni les conviene. Yo soy un socialista convencido y un revolucionario militante. De eso pueden dar fe los que me conocen desde que estudiaba bachillerato en 1963.

 

– ¿Sigue la oposición sin tener un proyecto de país?

 

-Lo tienen, pero no pueden exhibirlo porque no es un proyecto propio. Es la entrega a las transnacionales, es la subordinación a otros intereses, es la dependencia, es la pérdida de soberanía, es la mutilación del territorio, es la democracia tutelada. En ello, lamentablemente, está coincidiendo el Gobierno de Nicolás Maduro con el proyecto del Arco Minero del Orinoco.

 

-¿Cree que este año habrá referéndum? ¿Cuál es su posición?

 

-Hemos defendido el referéndum revocatorio como un derecho legítimo del pueblo conquistado por el Comandante Chávez para profundizar el socialismo, que es la verdadera democracia. La forma de vencer allí es como lo hizo Chávez: actuando políticamente. Sin embargo, tal como están las cosas, creo que este año no habrá referéndum, pero tampoco elecciones regionales en una posposición que no tiene ninguna excusa valedera. Lo extraño es la actitud en ambos casos de la derecha. En el referéndum mostraron interés aparente muy tardíamente para su instrumentación; más bien para usar su negativa como elemento de presión, de negociación; y es evidente que, en cuanto a las elecciones regionales, el interés ha sido nulo. Estos dos elementos, unidos a la información disponible sobre conversaciones entre los dos factores de la derecha: la MUD y los grupos que dirigen el Gobierno, junto a las negociaciones anti patria del Arco Minero y de los bonos de PDVSA, etc., nos llevan a concluir que ya está en curso un pacto tácito o expreso para una transición formal de entrega de la Revolución.

 

«Revocar a Nicolás Maduro en este momento para ir a unas elecciones sería entregar el poder a la otra derecha que ni siquiera está interesada en guardar la forma y esto podría significar, entre otras cosas, la reinstalación de la vieja Constitución.»

 

– Si fuese convocado el referéndum, ¿usted votaría a favor de revocar al presidente Maduro?

 

-Hasta este momento no lo haría, y esta es una posición absolutamente personal, porque no veo en ello la solución. Hay que construir, a partir del mayoritario pueblo chavista, un poderoso movimiento revolucionario que rescate las banderas de Chávez, el legado de Chávez. Revocar a Nicolás Maduro en este momento para ir a unas elecciones sería entregar el poder a la otra derecha que ni siquiera está interesada en guardar la forma y esto podría significar, entre otras cosas, la reinstalación de la vieja Constitución, la pérdida de las prestaciones sociales, el regreso de la práctica puntofijista de los presos, torturados y desaparecidos, la eliminación de la educación pública gratuita, las cuotas balón, sólo por nombrar algunos elementos.

 

– La oposición se vale de figuras como Giordani, Osorio y Navarro para embestir al Gobierno. ¿Esta utilización le remuerde la conciencia?

 

-Mi conciencia está absolutamente limpia. Tengo mi verdad y debo ser fiel a ella. ¿Cuánto no se han usado históricamente y se siguen usando las enseñanzas de Cristo para robar y asesinar a pueblos enteros y sin embargo…?

 

«Las familias están posponiendo todos sus proyectos vitales porque la prioridad es la solución del día a día y la responsabilidad en esto es compartida…»

 

– ¿Cree o descarta que el pueblo ha sido sometido al terror con el acaparamiento y la especulación con los alimentos esenciales?

 

-Obviamente se está produciendo una situación de terror que tiene paralizada a la sociedad. Las familias están posponiendo todos sus proyectos vitales porque la prioridad es la solución del día a día y la responsabilidad en esto es compartida: la corrupción de las dos derechas que se llevó los recursos frente a la mirada complaciente y cómplice de los administradores, los especuladores y ladrones criminales, y un Gobierno incapaz, que no toma decisiones, que no castiga a los corruptos, que pospone todo, que perdió el rumbo revolucionario.

 

«… la derecha no duerme. La derecha actúa y no tiene escrúpulos, ni siquiera respeta los parámetros formales de la democracia…»
– ¿Qué valoración hace del Gobierno de Macri y del arrebato a Dilma en Brasil?

 

-Esos dos ejemplos son simplemente una indicación de que la derecha no duerme. La derecha actúa y no tiene escrúpulos, ni siquiera respeta los parámetros formales de la democracia burguesa y no hay conciliación posible sino con el pueblo.

 

– ¿Qué opina de la presión contra Venezuela en Mercosur?

 

-Es absolutamente lógica. Allí concurren dos factores. Primero la relación de intereses políticos y económicos externos con una de las derechas de Venezuela que se evidencia por el regaño a Timoteo Zambrano, y segundo: la desaparición del mundo bipolar con la caída del bloque soviético introdujo modificaciones importantes en cuanto a la dinámica del capitalismo que, entre otras cosas, auguran una profundización en los conflictos regionales, tal como ha venido ocurriendo en África primero, y luego en el Medio Oriente, que en el fondo tienen como elemento motivador común las disputas por recursos naturales y por mercados. Este factor está comenzando a flotar en nuestra América. (Por cierto, se acaba de anunciar que se discute en Europa la creación de unas Fuerzas Armadas separadas de la OTAN. ¿Estaremos en presencia de la vuelta a la situación previa a la primera guerra mundial?)

 

– ¿Sigue militando en el Plan de la Patria?

 

-Sí, en el Plan de la Patria original, en el de Chávez. No en la versión publicada por Nicolás Maduro en la cual se eliminan, entre otros, conceptos fundamentales expresados en el Objetivo Histórico número 5. Invito a cualquiera a leer las dos versiones y compararlas.

 

– A usted y a Giordani se les señala por presumir de impolutos, es decir, hoy hacen críticas abiertas, pero que mientras estuvieron en el gabinete ejecutivo callaron siempre. ¿Qué responde a este señalamiento?

 

-Yo no presumo de impoluto. He sido hombre público, estoy sujeto al escrutinio de todos y soy responsable de mis actos. Las críticas las hacíamos en las instancias que nos correspondían. En mi caso en el Consejo de Ministros, directamente al Presidente y en la Dirección Nacional del PSUV. Ahora las hago ante la gente y ante los medios que me lo permiten.

 

– ¿Ya milita en Marea Socialista o sigue esperando por el tribunal disciplinario del PSUV?

 

-Ya hace tiempo la Dirección Nacional del PSUV decidió mi expulsión, aunque debo señalar que recibí la comunicación en la cual se me sancionaba con fecha anterior a la de la reunión de ese organismo efectuada para tal fin. No soy militante de Marea Socialista, pero tengo muchos amigos y camaradas en ese movimiento con los cuales comparto y he compartido buena parte de este ya largo camino.

 

– ¿Se reafirma como chavista?

 

-Absolutamente chavista, socialista, bolivariano y revolucionario, aunque exista redundancia en esos conceptos.

 

– ¿Qué es ser chavista?

 

– No quiero responder a esa pregunta después de haber respondido la anterior autocalificándome como chavista.

 

– ¿Qué es el socialismo bolivariano?

 

-Esta pregunta ameritaría una respuesta extensa que obviamente va muchísimo más allá que el ámbito de una entrevista. Por miles se han escrito libros sobre el socialismo y el calificativo de bolivariano lo extiende y precisa significativamente más. A manera de una definición amplia el Socialismo Bolivariano es un proyecto fundamentalmente ético de sociedad, de sociedad de hombres y mujeres libres, y sus relaciones con la naturaleza en un compromiso de respeto mutuo y de búsqueda del bien común sobre la base de la lógica del trabajo.

 

(Por Douglas Bolívar/Supuesto Negado)