“Voy a extrañar este lugar”, fue el mensaje que escribió en su último post en la red social Instagram la venezolana Carla Stefaniak, quien fue asesinada en Costa Rica durante sus vacaciones.
En la fotografía se puede apreciar a la víctima, de 36 años, recostada boca arriba en el borde de una piscina. En ese momento vestía un traje de baño azul turquesa y estaba rodeada de algunas plantas.
Una amiga de Stefaniak, identificada como Laura Jaime, declaró a los medios de comunicación haber presentido que algo le pasaría a la criolla cuando compartió su última fotografía en la referida plataforma digital.
“La foto me eriza. Está acostada, mirando hacia arriba. El cielo está despejado (…) Es como si supiera lo que iba a pasarle. Lo sabía, tenía un salto en el estómago que me lo decía”, afirmó.
Las autoridades de la nación centroamericana encontraron el cuerpo Stefaniak en avanzado estado de descomposición en una zona boscosa de San José, cerca del hotel Le Mas de Prevence, recinto en el que se hospedaba.
Según el Departamento de Investigación Judicial de Costa Rica (OIJ), el brutal asesinato pudo tener un motivo sexual, aunque todavía no se han ofrecido más detalles sobre el móvil que habría llevado a Bismarck Espinosa Martínez, guardia de seguridad del lugar y detenido como principal sospechoso, a cometer el crimen. Este hombre es un inmigrante nicaragüense de 32 años que llegó a Costa Rica en junio.
(LaIguana.TV)
