En una hacienda ubicada en el sector Los Hicacos en Guayabita, vía a Polvorín, parroquia Pedro Arévalo Aponte del municipio Santiago Mariño, en Aragua, sujetos que ya fueron identificados plenamente dieron muerte a uno de la dinastía Girón, familia muy conocida en Aragua y en otros estados del país.
La víctima se llamaba Carlos César Girón Rojas, de 61 años de edad, padre de un hijo, sobrino mayor de la dinastía Girón, según la información facilitada a este diario a través de sus allegados.
De acuerdo con el relato, la persona se encontraba en esa propiedad trabajando desde hacía un año y al parecer fungía como el encargado.
La noche del sábado, después de tanto ajetreo, el ciudadano estuvo compartiendo algunos tragos con varias personas entre ellas dos mujeres y dos trabajadores.
Según la inspección ocular, en la escena del crimen se observaron unas botellas de licor y colillas de cigarrillos, así como otros elementos de interés criminalístico.
Al transcurrir de las horas, ya en la madrugada del domingo, se originó una situación irregular, presuntamente con una de las invitadas.
En medio de la violencia, los supuestos obreros tomaron entre sus manos al encargado y lo amarraron con las manos hacia atrás. De allí lo pasaron a la habitación principal, donde lo degollaron con un cuchillo.
Antes de que amaneciera, los sospechosos se retiraron de la zona, tratando de pasar desapercibidos y una persona que escuchó ruidos extraños, notificó que “algo raro” había sucedido en “Los Hicacos”.
En aras de confirmar la sospecha, comisiones policiales se trasladaron al sitio encontrándose con signos de violencia y el cuerpo de la víctima en la habitación principal.
Horas más tarde, una comisión de la División de Homicidios del estado Aragua, bajo el mando del comisario Jesús Rivera, se trasladó al sitio iniciando las averiguaciones de rigor.
Los sabuesos colectaron evidencias de interés criminalístico. Se dijo que los homicidas ya fueron identificados plenamente y se presume que en las próximas horas se capturen.
En las primeras de cambio, se habló de la hipótesis del robo, pero, según las investigaciones del caso, el móvil se orienta hacia una venganza por aparentes líos de faldas.
Al cierre de esa edición se indicó que las comisiones mixtas de la PA y el Cicpc “peinaban” varias zonas tras la captura de los implicados.
Por otro lado, se comentó, de manera extraoficial, que a la víctima, su familia que vive en Madrid, le había notificado que abandonara ese sitio y se marchara incluso del país.
No obstante, Carlos César Girón, quien también estuvo involucrado en las corridas de toros cuando sus años mozos, expresó que seguiría trabajando en la finca y apostaría por un mejor futuro en Venezuela país. Sin embargo, durante la madrugada de ayer murió degollado. Las circunstancias aún son investigadas por el Cicpc.
v
