El joven Julio Rabas seguro nunca sospechó que tras una noche de tragos y de compartir con amigos en la discoteca Scuadron en el estado Vargas, su vida acabaría al quedarse dormido en la baranda de un edificio y caer desde el 7mo piso.
Según versiones del suceso, el joven de 18 años de edad residenciado en la entidad litoralense, llegó en estado de ebriedad a su hogar en horas de la madrugada del sábado y al no tener llaves para abrir la puerta de su casa decidió quedarse dormido recostado a una de las barandas, luego en la profundidad del sueño sin percatarse se fue al vacío.
Este lamentable hecho se produjo en las residencias Cimas del Mar, de la urbanización La Llanada.
Vecinos afirmaron que el joven era muy alto y las barandas muy bajas.
Entre las aspiraciones de Raba estaba el ser piloto.
(LaIguana.TV)
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— CaraotaDigital (@CaraotaDigital) 11 de febrero de 2017
