Cuando la excongresista Aída Merlano se evadió de la custodia policial durante una consulta médica, el pasado primero de octubre, el gobierno colombiano ofreció una recompensa de 50 millones de pesos a quien pudiera aportar información acerca de su paradero.

 

Sin embargo, el 16 de octubre de 2019, el gobierno de Iván Duque cuadriplicó el monto de la recompensa, ofreciendo 200 millones de pesos a los que aportara información que condujera a la captura de Merlano y sólo entonces solicitó a Interpol la emisión de una alerta naranja, orientada a capturarla incluso si estaba fuera del territorio de Colombia, evidencia perfectamente comprobable con la mera revisión de los titulares de prensa de los medios del vecino país en una y otra fecha.

 

El dato, aportado por el usuario de la red social Twitter, @@GiordanoBrunoFi, coincide con lo declarado ayer por la exsenadora ante la justicia venezolana. Entre otras cosas, indicó que luego de evadirse, permaneció en Bogotá durante algunos días y el gobierno colombiano siempre supo dónde estaba. Posteriormente, se trasladó a una finca ubicada en la población de Valledupar en donde se enteró que, en lugar de ser protegida, sería asesinada y desaparecida, lo que motivó su huída hacia Venezuela.

 

(LaIguana.TV)