Fausto Russo, de 38 años, es entrenador personal que ha trabajado en equipos de fútbol como la Roma, el Formia o el Minturno. Nacio en Cariati, reside en la región del Lazio. Actualmente se encarga de la preparación física del Atlético Fiuggi Terme,de la Serie D italiana, además de trabajar en un gimnasio en su ciudad. Desde hace una semanas permanece ingresado al padecer coronavirus.

 

En el hospital de Santa Maria Goretti en Latina, un médico le propuso unirse a un tratamiento experimental que ya se llevaba a cabo en dos hospitales de Nápoles. No lo dudó. Empezó a se tratado con un medicamento utilizado para la artritis reumatoide.

 

«En 48 horas mejoré entre un 60 y un 70%. Solo puedo agradecer al doctor Ascierto por llamar la atención de todos los demás centros en Italia sobre este medicamento y por liderar el ensayo porque se trata de salvar vidas», comentó a Rai Sport.

 

Russo contó que no sabía donde contrajo el coronavirus ya que no visitó ninguna de la zonas de riesgo en su país. «Tuve una fiebre muy fuerte y no se iba, luego hubo complicaciones respiratorias y en ese momento terminé en el hospital. Allí me hicieron la prueba y di positivo. Solo poder contarlo y hablar sobre eso es mucho para mí», señala.

 

Durante seis días estuvo con oxígeno, que recibía a través de un casco presurizado que le colocaron en la cabeza. No se podía mover de la cama. Ahora, tras recibir el tratamiento, su mejoría ha sido notable mientras pide a todo el mundo que se quede en casa. «Si me hubieran dicho que tendría que quedarme en casa durante 15 días, lo habría hecho de buena gana», afirma. Su mejoría es un rayo de esperanza en la búsqueda de un medicamento que alivie los síntomas provocados por el coronavirus.

 

(Marca)