rocio10081512.jpg

La presentadora de Globovisión, Rocío Higuera, denunció a la opinión pública el acoso que vía redes sociales  sufre desde hace algún tiempo por un hombre.

 

Higuera narró que el evento con el acosador, quien se hace llamar Ronald Azuaje, inició hace algunos años cuando llevaba a las féminas del canal, flores y dulces, planta ubicada en la Alta Florida; desde entonces la persecución se ha volcado a las redes sociales.

 

Según la periodista del programa «Sábado en la noche», el acusado ha suplantado su identidad, creando en Facebook un perfil falso desde hace cuatro años, alimentándolo con datos de la periodista.

 

A continuación el mensaje completo que escribió en su cuenta de Instagram para denunciar al acosador:

 

«Sé que estoy insistente y me da pena. Créanme que preferiría no hacer esto y menos señalar a alguien que seguramente tiene familia y dolientes.

 

Pero esta persona @Ronald.White (cuyo nombre real creo que es Ronald Azuaje) hace más de 4 años se ha dedicado a hacer perfiles falsos haciéndose pasar por mí, no sólo dañando mi imagen, sino también estafando y embaucando a gente.

 

Por darles un ejemplo: inventó que soy depresiva y que quise suicidarme cuando mi mamá murió, le ha pedido a personas medicinas supuestamente para mi papá, él mismo se ha hecho pasar por mi hermano y usando mi nombre ha tratado de conseguir trabajo, a otros les dice que es mi representante, ha mantenido relaciones sentimentales bajo mi identidad usando un Pin (blackberry, supongo) con el que finge ser yo… Para no recibir llamadas dice que el auricular del tlf está malo, pero en otras ocasiones ha puesto a mujeres a atender el teléfono y hacerse pasar por mí.

 

Él era un fanático que hace años nos llevaba dulces a Globovisión. Entre @melisarauseo y yo logramos descubrirlo. Entonces le dije que esto tenía que parar, él me dijo que había cometido un error y que iba a rectificar. Pero eso no sucedió, yo perdí su contacto. Años más tarde puse una denuncia en el CICPC cuando engañó y se burló de un colega periodista a quien prefiero no nombrar (imagínense lo maquiavélico y astuto que es, para engañar a gente del medio en el que trabajo, gente que es preparada) las autoridades tampoco pudieron hacer mucho. Y yo no insistí más.

 

Él ha seguido usurpando mi identidad, creando perfiles falsos y engañando a muchas personas. La diferencia entre cualquier «loquito» de las redes, es que éste va más allá, es un embaucador profesional. Gente que ha logrado descubrir su locura, luego de meses, me ha llamado preocupada.

 

Hoy lo responsabilizo de cualquier cosa que me pase. Me da tristeza tener que hacer esto. Pero esta persona no está sana mentalmente y sinceramente me da terror pensar hasta dónde pueda llegar su obsesión. Dios quiera que no pase a más. Mi experiencia es que con los años, ha empeorado.

 

Ustedes por favor no le den acceso a sus cuentas. Cualquier mensaje extraño que reciban sepan que no soy yo».

 

(LaIguana.TV)