Un nuevo caso de contaminación de alimentos procesados debe mantener alerta a la población venezolana, desde que medios colombianos reportaron una alarma entre las autoridades de salud de Santander el miércoles 26 de octubre porque hasta el momento no ha aparecido ni una sola de las 24.000 mil latas de atún contaminadas por saturación de mercurio de la marca Van Camp’s en ese departamento.
El secretario (e) de Salud de Santander, Wilson Peña, declaró que se activaron los operativos en todo el departamento, donde funcionarios de la Gobernación y alcaldías buscan en distribuidoras de abastos, supermercados y tiendas las latas del atún en agua identificado con el número W2653-40220.
“Hacemos un llamado a la comunidad para que las personas que identifiquen este lote no lo consuman y quienes tengan de estas latas no las vendan y las entreguen al distribuidor”, expresó el funcionario.
Este hallazgo se produce solo dos semanas después de que la Secretaría de Salud de la Gobernación Atlántico, en Barranquilla, anunciara el retiro de los supermercados de un lote aproximadamente 20.000 latas de Lomitos de Van Camp´s porque sobrepasaban el nivel permitido de mercurio, a través de una circular que publicaran el jueves 13 de octubre.
En este caso las latas se retiraron del mercado y los distribuidores evitaron que llegaran a comercializarse las que aún estaban en la cadena.
Según las muestras que tomó el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) en Boyacá, las latas contenían 1.39 mg/Kg de mercurio, sobrepasando 0.39 mg/Kg el límite). En el caso de las que aún no se han encontrado en Santander, éstas contienen 1,51 miligramos por kilogramo.
El Invima aseguró que no hay riesgos en la salud para quienes hayan consumido atún de este nuevo lote, debido a que los riesgos del metal para el sistema nervioso son cuando el consumo de pescados con altos niveles del mercurio es crónico.
Sin embargo, anunció que la empresa colombiana Seatech International, dueña de la marca Van Camp’s, podría pagar una multa de unos 220 millones de pesos por este y el pasado lote del pescado., pues evidentemente su consumo si es perjudicial para el organismo.
Los productos marinos se consideran una fuente primaria de exposición humana a mercurio ambiental. Mientras el sea más grande, más viejo y se alimente de otros pescados, es más probable que acumule más mercurio. Este metal se deposita en los tejidos y su eliminación del organismo es muy lenta. Por ser una especie depredadora y estar en un punto alto de la cadena alimenticia, el atún acumula más mercurio que otros peces.
Los altos niveles de mercurio en el atún son una realidad mundial. La maniobra de las atuneras para cumplir con las normativas sanitarias es mezclar peces más jóvenes y por lo tanto menos expuestos al mercurio con peces más viejos y grandes donde las concentraciones son mayores.
Las artimañas de aquellos sectores comerciales que desestiman sus controles sanitarios priorizando el lucro a costa de un consumidor engañado y también necesitado, no son novedad en nuestro país, desde que la crisis económica generó, para vergüenza de los patriotas, toda una serie de prácticas de usura, trampa y especulación, muchas de ellas reportadas en este portal.
Desde la leche mezclada con cal, hasta la borra de café vendida en bolsitas, pasando por todos los productos alimenticios que han intoxicado a familias y aquellos que aparentan lo que no son, como la mantequilla rellena de papel sanitario mojado, ha llevado a los consumidores a ser más precavidos con las compras “bachaqueras”.
Por este motivo, hacemos un llamado a ser cuidadosos con este rubro, no solo de esta marca, pues para muchos una lata de atún de dudosa procedencia pude ser reescrita con una nueva etiqueta con tal de ser vendida.
(LaIguana.TV)
