Los gobiernos de los presidentes Nicolás Maduro y Gustavo Petro trabajan en un plan de contingencia para recuperar la operatividad de la productora de fertilizantes Monómeros, informó su nuevo gerente general, Iván Sánchez Hernández.
«Como es de dominio público, la empresa la encontramos en una situación compleja desde el punto de vista financiero y vamos a trabajar en el tema de mantenimiento y de materias primas que es fundamental [para] que no se vea afectada», detalló Sánchez en entrevista con El Heraldo, medio colombiano de la costa.
El funcionario refirió que el plan contempla, entre otros aspectos, el traslado de materias primas desde su casa matriz en Venezuela a las plantas de Barranquilla y Buenaventura, en Colombia.
En su decir, una vez la junta designada por la Petroquímica de Venezuela (Pequiven) asuma el pleno control de la empresa, llegará el primer buque con entre 12.000 y 14.000 toneladas de urea y otras materias primas como KCL, amoníaco y roca fosfórica, requeridas para la producción industrial en Monómeros.
Defendió, asimismo, que el plan de contingencia impactará «a Colombia de manera transversal, en especial con la urea que llegará a un precio preferencial y con facilidades de pago», lo que debería estabilizar el funcionamiento de la empresa venezolana en el corto plazo.
También se espera la reducción del precio de los fertilizantes en el mercado interno, que desde 2019 se han elevado por sobre el 40 %, en parte por el efecto de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos sobre la industria petrolera venezolana.
«Las medidas contra Venezuela en el caso Monómeros afectaron directamente a los productores y al consumidor, ya que es una compañía que afecta a toda la cadena productiva en Colombia», puntualizó el directivo.
Sánchez restó importancia a las especulaciones según las cuales, una vez la empresa regrese a manos del Estado venezolana, la Oficina para el Control de Activos Extranjeros (OFAC) suspenda la licencia de operación que le otorgó hasta junio de 2023, pues ello afectaría principalmente los intereses colombianos.
«El primer afectado sería Colombia y esperamos el acompañamiento de las autoridades y que nos den la oportunidad de trabajar como lo veníamos haciendo, con un buen desempeño», dijo al respecto.
De otro lado manifestó que la nueva junta directiva está a la espera de que la Superintendencia de Sociedades ratifique su registro de inscripción, tal y como lo hiciera el pasado 15 de septiembre la Cámara de Comercio de Barranquilla.
«Como no cabe otro recurso, nos toca asumir la empresa como corresponde», indicó en relación con la decisión, sobre la que se ha dicho que pondrá punto final a la situación de despojo vigente desde enero de 2019.
Para concluir, el funcionario envió «un mensaje de tranquilidad» a los trabajadores, a los clientes y proveedores sobre el futuro de la empresa: «La vamos a mejorar», aseveró.
El Heraldo refiere que «Iván Sánchez es ingeniero agrónomo con máster en procesos industriales, es colombo-venezolano nacido en Barranquilla y cuya carrera profesional ha desarrollado en diversos sectores en Venezuela como petróleo y gas».
Sánchez fue propuesto como gerente general de la compañía a mediados de junio por la petroquímica estatal de Venezuela. Si el trámite en Supersociedades se resuelve positivamente, tal y como lo ha manifestado el gobierno del presidente Gustavo Petro, sustituirá a Guillermo Rodríguez Laprea, pretendido gerente general designado por el exdiputado Juan Guaidó, quien ha intentado, sin éxito, preservar su posición.
(LaIguana.TV)
