A pesar de la caída del precio del dólar “paralelo” en los últimos días, los productos básicos en los supermercados siguen siendo inaccesibles para los venezolanos. Desde el lunes 12 de diciembre hasta este viernes 16 de diciembre, el llamado «dólar negro» ha perdido 1.748 bolívares, cuyo estrepitoso descenso se debió a la orden presidencial del retiro del billete de más alta denominación en Venezuela.
Para los consumidores de a pie, este «golpe» al portal norteamericano dolartoday.com no ha sido suficiente.
Algunos establecimientos comerciales de Maracaibo ofertan artículos colombianos y brasileños que antes no se conseguían en los anaqueles como leche en polvo, azúcar, arroz, café, pero a precios muy elevados, casi o superior al valor del «paralelo» que actualmente ronda (para este viernes 16 de diciembre) los 2.506 bolívares.
Por ejemplo, solo medio kilo de arroz es vendido en 2.070 bolívares; un kilo de pasta cuesta 4.270; medio kilo de café sale en 5.250; un kilo de azúcar vale 4.300; y un litro de aceite se encuentra hasta en 4.750 bolívares.
Quien necesite ‘estirar’ el salario lo más posible para una quincena o el mes, la leche en polvo “es de mirar y no tocar”. La presentación en papeleta de 900 gramos, proveniente de Colombia, está en 15 mil bolívares. Otra marca parecida, enriquecida con otros componentes, tiene precio de 19 mil bolívares y la más pequeña, de 400 gramos, en 7.000 bolívares. Una diferencia exagerada en relación al precio establecido por la Sundde, la cual fijó el costo de 900 gramos en 64 bolívares.
Las unidades comunes de otros productos demandados por los consumidores también son difíciles de ubicar. Un frasco de mayonesa, de 500 gramos, casi no se encuentra en los anaqueles. La mayoría son presentaciones importadas de 1 y hasta 4 kilos, que alcanzan los 13.000 y 35.000 bolívares, respectivamente. La salsa de tomate, en bolsa de un 1 kilo, se consigue en 10.800 bolívares.
Para el marabino José Silva los productos nacionales siguen sin aparecer y los precios, con respecto al ‘paralelo’, no han variado del todo. “Llegué al supermercado y sigo viendo los mismos precios. Una harina de maíz colombiana en 4.000 bolívares ¿Quien aguanta esto? Me voy sin comprar nada”, dijo indignado al salir del establecimiento.
Desde un supermercado en la zona norte de la ciudad, Melissa Antúnez opinó que no es mucha la diferencia en los montos. “Sé que comprando a estos precios no le estoy dando ganancia a los bachaqueros sino a los comercios que se encargan de importarlos, pero igual están muy caros. Tengo que comprarlo por mi familia y mis hijos”, dijo la ama de casa.
Virginia Basabe comentó que los precios son una “grosería” y un golpe al bolsillo de todos por la especulación de algunos propietarios. “No entiendo por qué si en algunos supermercados venden la presentación del café nacional de 200 gramos en 1.700 bolívares en otros se consiguen en 2.267. Esto es un drama nacional, todo se mantiene costoso”, añadió.
Según la Sundde, el café de 200 gramos debería venderse en 144 bolívares, el café de medio kilo en 358 y el kilo en 964.
Sin embargo, hace una semana, los precios de algunos productos estaban “por las nubes” con respecto al ‘paralelo’, cuando se ubicó en 4.587,73 bolívares.
“El kilo de azúcar estaba en 5.300 y ahora, en el mismo local, estaba en 4.300, le bajaron 1.000 de golpe”, dijo Marco Hinestroza, usuario.
Para aquellos mayoristas y empresas de producción, un saco de azúcar brasileña, de 50 kilos, estaba en 200 mil bolívares y redujo el costo a 175 mil.
«No me parece que sigan vendiendo estos productos a este precio tan elevado. No sabemos qué hacer para comprarlos porque el sueldo ya no alcanza», dijo el comerciante Luis Mario Briceño.
El primero de noviembre entró en vigencia el aumento del 40% del salario integral quedando el mínimo en 27.092 bolívares y la cesta ticket en 63.720 bolívares.
