Siguiendo su política de terrorismo informativo, el autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó afirmó este jueves que durante los últimos días venezolanos han fallecido en las calles, sin ofrecer ningún respaldo que permitiera corroborar sus afirmaciones.
“Por lo menos han muerto cinco personas en las calles. No sabemos de qué causa porque no hay información oficial. Obviamente, eso no se veía hace dos meses ni el año pasado”, aseguró el dirigente de la oposición extremista durante una entrevista con la emisora argentina Radio con Vos.
Irresponsablemente, el parlamentario no precisó ni las fechas ni los lugares en los cuales se habrían producido esos decesos y tampoco publicó en sus redes sociales ninguna información que permitiera corroborar sus declaraciones. En su lugar, se limitó a referir que en las inmediaciones de la estación del metro Caricuao, una persona se había desmayado, presuntamente por causa de una neumonía.
Asimismo, en congruencia con sus intervenciones previas en relación con la transparencia de las cifras presentadas por el Gobierno Bolivariano, Guaidó volvió a cuestionarlas y como “contraargumento” mencionó que “una fuente del Ministerio de Salud” le había asegurado que habían “más de 200 casos positivos de coronavirus”.
De nuevo, más allá de la palabra de una presunta fuente anónima, no hay modo de comprobar la veracidad de lo que dice, que no se corresponde con lo reportado y respaldado por instituciones oficiales como la Organización Mundial de la Salud y entes como la Johns Hopkins University y Worldometer, que llevan un conteo en vivo de los casos reportados a nivel mundial.
El diputado ultraderechista también aseveró –de nuevo, sin mencionar en qué se basaba– que el 83% de los venezolanos no cuenta con acceso al agua potable a través de tuberías y que en el sistema público de salud solamente hay 84 respiradores, una cantidad insuficiente para hacer frente a las infecciones por coronavirus.
Siguiendo una línea fatalista e ignorando el evidente éxito que han tenido las medidas sanitarias implementadas por el gobierno del presidente Nicolás Maduro en la contención de la pandemia, declaró: “Si el virus se llega a comportar como en otros países de la región, por no mencionar a Europa, tendríamos una situación bien difícil porque tenemos una crisis humanitaria preexistente”.
La llamada “crisis humanitaria preexistente” que menciona Juan Guaidó, se debe en buena medida a las sanciones ilegales impuestas por Estados Unidos a Venezuela desde mediados de 2016 y con especial énfasis desde enero de 2019, momento en el que él se autoproclamó presidente interino y a partir del cual no ha cesado de solicitar más medidas coercitivas en contra de los venezolanos y de intentar chantajear el pueblo.
La más reciente de estas amenazas se produjo el pasado 12 de abril, cuando aún en medio de una pandemia, informó durante una entrevista que “vendrán más sanciones”. “Si el 5 de enero de 2019 no nos creyeron que íbamos en serio, es hora de irlo haciendo”, dijo entonces.
(LaIguana.TV)
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