Rusia se retiró en forma oficial del Tratado de Cielos Abiertos, un acuerdo que buscaba la cooperación entre Moscú y Occidente en materia de vigilancia aérea, pero el anterior Gobierno de Estados Unidos lo abandonó de forma unilateral. 

El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia hizo oficial este sábado la decisión, un año después de que Moscú anunciase su intención de abandonar el tratado.  

«A partir del 18 de diciembre de 2021 Rusia deja de ser parte del Tratado de Cielos Abiertos», informó el Ministerio de Exteriores de Rusia en un comunicado. 

El Kremlin ha asegurado que la retirada de Estados Unidos del acuerdo en 2020 ha forzado la salida de Rusia debido al desajuste de los intereses de los firmantes del pacto.  

«Uno de los argumentos de peso para integrarnos fue la participación de EE.UU. en el tratado, que abogada por la transparencia en la esfera militar pero no se apuraba a abrir su territorio para la aplicación de medidas que elevasen la confianza», señaló el Ministerio de Exteriores. 

No obstante, «las décadas del cumplimiento fructífero del Tratado de Cielos Abiertos demostraron que sirvió bien como herramienta del fortalecimiento de la confianza y la seguridad, creó posibilidades adicionales para la valoración objetiva y no prejuiciada de las capacidades militares de los países participantes», según Moscú. 

«Abandonamos el tratado con la conciencia de un gran trabajo hecho para conservarlo. En dos décadas Rusia recibió el mayor número de misiones de observación entre todos los países participantes, llevamos a cabo 646 y recibimos en nuestro territorio 449 de las 1580 efectuadas», señaló la entidad. 

El Tratado de Cielos Abiertos permite el vuelo de vigilancia de aeronaves desarmadas en más de tres decenas de territorios. Rusia hizo un llamamiento a Estados Unidos para que volviese al acuerdo mientras que Washington ha acusado a Moscú de violar el tratado. 

(teleSUR)