Este viernes 6 de noviembre la presidenta de la Fundación Latinoamericana por los Derechos Humanos y el Desarrollo Social (Fundalatin), María Eugenia Russián, instó al Ministerio Público y a la Contraloría General de la República a que inicien una averiguación sobre la desviación de los recursos de CITGO, los cuales fueron asignados a la Fundación Simón Bolívar para asistir a pacientes con enfermedades crónicas que requieren tratamientos de alto costo. 

La solicitud de Russián fue expuesta durante el foro online «Caso Citgo: Afectaciones al derecho a la vida de niños y niñas con enfermedades graves».

De igual manera, alentó a las autoridades de Estados Unidos a indagar respecto a estos actos que se revelaron tras el embargo del  gobierno norteamericano a CITGO.

Destacó  que después de la aplicación de las medidas coercitivas y unilaterales de Estados Unidos a Venezuela se detuvo la atención a pacientes que recibían trasplantes y los cuales en la actualidad no cuentan con los tratamientos indicados exclusivamente para este tipo de casos.

Enfatizó que, como consecuencia de esta situación, el organismo reportó el fallecimiento de seis niños que se encontraban registrados en la lista de espera.

Russián aseveró que Fundalatin tiene asentados 48 casos de pacientes a la espera para ser beneficiados con un trasplante. “Las sanciones matan y generan violación de los derechos humanos a la población venezolana”, explicó la titular de la organización.

Recalcó que un 90 % de los niños eran asistidos en el programa de salud que ejecutaba CITGO.

Utilizan los recursos de CITGO para fines distintos a la atención de los pacientes que necesitan atención médica especializada. El llamado desde Fundalatin es a levantar el bloqueo financiero y comercial contra el país que está vulnerando los derechos de toda la población venezolana”, expresó.

El Estado venezolano cubría todos los gastos médicos, de hospedaje y otros

Por su parte, la integrante de Fundalatin, Desiré Cabrera, detalló que todos los niños de escasos recursos recibían atención del referido programa de salud, que les suministraba la ayuda médica. Agregó que este plan era un programa desarrollado con organizaciones como la Fundación para el trasplante de la Médula Ósea con la Fundación Simón Bolívar.

Explicó que el Estado venezolano contribuía con beneficios y cubría todos los gastos destinados  a trasplantes, tratamientos y exámenes, el hospedaje, la alimentación, el transporte, la dotación de medicamentos, entre otros.

Cabrera sostuvo que las sanciones impuestas por Estados Unidos trajeron como consecuencia la paralización del programa de atención médica, además, imposibilitan que se concreten los pagos en hospitales de Venezuela, Italia y Argentina, reseñó Venezolana de Televisión.    

Testimonios de familiares de niños afectados

El padre de la niña Isabela paciente atendida en Fundalatin, Douglas Guevara, manifestó que las medidas impuestas por el Gobierno norteamericano  son una clara arbitrariedad contra la vida y los derechos humanos.

Puntualizó que su pequeña recibió en Argentina un trasplante de hígado gracias al programa de la Fundación Simón Bolívar costeado por Pdvsa a través de su filial CITGO.

Narró que, ante la intervención de la Fundación Simón en el 2019, lamentó cuando fueron comunicados de que el convenio debía ser interrumpido porque los recursos en el exterior estaban bloqueados, por lo tanto, ya no podían cubrir los gastos clínicos de los niños, que para entonces se reportaban seis.

Por su parte, Leudy Parra, madre del niño Islán otro paciente atendido en Fundalatin, declaró que su hijo fue trasplantado en el año 2013 a través de la alianza con la organización Simón Bolívar, indicó  que al presente hay 18 niños en espera para  ir a Argentina y recibir trasplante, y que su condición “está entre la vida y la muerte”,  aseguró.

Desde el año 2018 estas sanciones nos arrebató este programa de protección para nuestros hijos y los condenaron a la muerte, porque es la muerte la que nos persigue todos los días y cada noche, cuando estos niños no reciben el trasplante, no reciben los tratamientos quirúrgicos, ni mucho menos la intervención quirúrgica que cuesta 21 mil dólares”, concluyó. 

(LaIguana.TV)